El Ayuntamiento notifica el desalojo a los inquilinos de Obispo Valero 8 y les da un mes para dejar el edificio

Son siete los inquilinos implicados y una de las familias se muestra dispuesta a pedir un alquiler social

El Ayuntamiento de Cuenca ha notificado este lunes, a través de la Policía Local, el desalojo a los inquilinos del inmueble situado en la calle Obispo Valero 8 y les ha dado un mes de plazo para abandonar el edificio, necesario para la ampliación del Museo de Cuenca.

Josué Saavedra, que vive con su mujer y dos hijas en el segundo piso, ha indicado que «hace un rato ha venido un Policía Municipal y me pone aquí un comunicado para el desalojo como consecuencia del estado del inmueble y necesaria rehabilitación integral. Ordena el desalojo del inmueble en el sitio de Obispo Valero número 8 a todos los ocupantes en un plazo de un mes a contar desde la recepción de la presente notificación». Saavedra afirma que, en la actualidad, residen en el inmueble un total de siete personas «un señor mayor en el cuarto, nosotros en el segundo, otro en el primero con seis hijos y un anciano abajo».

Saavedra sostiene que carece de contrato de alquiler o propiedad. «Reconozco que estoy de ocupación pero gané un juicio y estoy intentando llegar a un acuerdo. Estoy intentando ponerme legal desde hace quince años y no me hacen caso. Ha llamado mi abogada más de 80 veces al Ayuntamiento y nada. Ya llevo aquí quince años. A mi no me importaría pagar un alquiler social. Me denunciaron por usurpación, el primer año que entré, y el juez me dio la razón. Entré aquí porque pertenecemos a la asociación gitana y vivía en una situación extrema. Estamos en situación de vulnerabilidad y no nos ofrecen ningún tipo de ayuda, nada más que a la calle»

El inquilino asegura que «hace tres meses hubo una fuga de agua. Me arreglan el baño, me apuntalan toda la casa yme cobran 2.500 euros. La arquitecta me dijo que la casa está bien y que se puede vivir, y ahora me dicen que no «. Saavedra afirma que su situación es delicada. «Somos vulnerables. Estoy de baja con unos tranquilizantes súper potente, cobro 600 euros míseros y tengo mi mujer artrosis reumática, dos niñas y uno en camino y me veo en la calle y no te dan ninguna ayuda»